Se conoce como parto prematuro aquel que se produce antes de la semana 37 de embarazo, así como el hecho de sentir contracciones regulares antes de también la semana 37.
El hecho de tener síntomas de parto prematuro no significa que tu bebé vaya a ser prematuro, ya que la mitad de las mujeres que presentan estos síntomas acaban dando a luz a las 37 semanas o más.
Sin embargo, una cuarta parte de los embarazos prematuros son planeados, ya sea por una complicación grave o porque el bebé simplemente ha dejado de crecer.
- Hay algunos síntomas que te pueden avisar de que estás teniendo un parto prematuro:
- Aumento del flujo vaginal
- Que el flujo se vuelva acuoso, mucoso o sanguinolento
- Dolor abdominal similar a un cólico o más de cuatro contracciones por hora
- Aumento de presión en la zona pélvica
- Dolor en la parte baja de la espalda
Algunos pueden ser poco claros y pueden deberse a otras causas, pero aun así es mejor prevenir, así que la mejor opción es llamar al médico o partera si se presenta alguno de estos síntomas.