Un bebé recién nacido debe dormir una media de entre 16 a 18 horas diarias, en periodos de 3 a 4 horas aproximadamente. A medida que el bebé crezca, sus ciclos de sueño cambiarán, así que te recomendamos que tengas mucha paciencia. Entre los 4 y los 6 meses, la mayoría de bebés puede dormir entre 8 y 12 horas seguidas durante la noche, pero conviene tener en cuenta que cada bebé es diferente por lo que la mamá y el papá deberán esforzarse para que el bebé crezca en unos hábitos de vida saludables, empezado por regular y establecer unos ciclos de sueño determinados.