Estar embarazada no implica que no puedas hacer deporte. Al contrario, puedes hacerlo, siempre y cuando evites los deportes más intensos, y lo practiques con precaución y de una manera moderada. A continuación, te detallamos una serie de consejos para que tengas en cuenta a la hora de practicar algún deporte durante el embarazo:
Consulta con tu médico antes de practicar cualquier tipo de actividad física
- Procura hidratarte y comer alimentos ricos en hidratos de carbono o potasio antes de hacer deporte, como un plátano, frutos secos o una barrita de cereales
- Realiza ejercicios de calentamiento y estiramiento, antes y después de la actividad, respectivamente
- No hagas deporte si hace mucho calor, hay un exceso de humedad o te sientes cansada
- Utiliza prendas amplias, que transpiren el sudor, y zapatillas de deporte
- No continúes con la actividad si te mareas o te cansas
- Intenta realizar las actividades siempre bajo la supervisión de un monitor o un profesional