Durante el embarazo es conveniente que realices una actividad física moderada y, sobre todo, que seas prudente a la hora de realizar determinados tipos de ejercicios. A excepción de casos puntuales, puedes realizar deportes cardiovasculares, como caminar, nadar o, incluso bailar, y deportes de flexibilidad y fuerza, como el yoga, la gimnasia o ejercicios de estiramiento, siempre y cuando los lleves a cabo con moderación y evites realizar sobreesfuerzos.
Te recomendamos que consultes primero con tu médico y que, al más mínimo dolor, interrumpas la actividad para no forzar ni a tu cuerpo ni a tu bebé.
Los deportes "prohibidos" durante el embarazo
Durante el embarazo, debes evitar los deportes "prohibidos" que te citamos a continuación:
- Los deportes colectivos (fútbol, baloncesto, volleyball, balonmano…).
- Los deportes de lucha (boxeo, judo, taekwondo,…).
- Los deportes más intensos y enérgicos (aeróbic, zumba, fitness).
- Otras actividades como montar a caballo, esquí o patinaje, ya que conllevan un riesgo muy alto de caídas.