Se considera embarazo adolescente o embarazo precoz aquel que se produce durante la adolescencia, es decir entre el inicio y fin de la pubertad.
Por eso, podemos considerar un embarazo adolescente aquel que tiene lugar entre los 10 y los 19 años, aunque esta edad varía según los diferentes países del mundo.
La mayoría de los embarazos adolescentes no son deseados, es por eso que no siempre se produce el nacimiento, sino que en muchos casos tiene lugar un aborto inducido. En otras ocasiones puede ocurrir un aborto espontáneo, ya que el cuerpo de una adolescente puede no estar preparado para un parto.
Las adolescentes embarazadas suelen enfrentarse a una mayor desprotección que el resto de embarazadas. Esta situación además produce mayores preocupaciones sobre su salud y su situación socioeconómica.
En los países desarrollados hay una relación entre el embarazo adolescente con niveles de educación más bajos, mayores tasas de pobreza y situaciones de inestabilidad familiar y social.
El embarazo adolescente en los países desarrollados suele producirse fuera del matrimonio y conlleva un conflicto social en muchas comunidades y culturas.
Sin embargo en países en desarrollo o subdesarrollados se suele producir dentro del matrimonio y no implica un estigma social.